La comunicación, es una palabra con un significado tan transversal y global que a veces confundimos sus acepciones. El Covid19, nos ha traído un conflicto de escala mundial, gran desorientación y pérdida de control. Una crisis generalizada, de gran magnitud que requiere de líderes en todos los ámbitos (Institucionales, empresariales, familiares…) que puedan tomar una amplia perspectiva de los ingredientes de la situación, para anticiparse de la mejor forma posible y permita actuar rápidamente. Los tiempos son importantes, si bien la pausa para pensar, analizar y saber que riesgo tomar es crítico.
Una vez analizados todos los riesgos, la comunicación es clave porque puede sostener el tejido comuninatario. La palabra bien pronunciada une. La confianza no se sobreactúa ni se impone. Se tiene y se comparte. Hay que convencer explicando y sabiendo en todo momento que los gestos también comunican y a veces hablan más que las palabras.
De su buen o mal uso, depende en muchos momentos la certidumbre. La transparencia es un valor primordial, ser claro en lo que sabemos, en lo que no sabemos y en lo que necesitamos aprender, escuchar, reflexionar…. Al final todo se reduce a una cuestión de confianza y para ello las diferentes formas de comunicación son habilidades indispensables. Esconder malas noticias, no hablar claro, genera inseguridad.
